OSC denuncian violaciones a derechos humanos de mujeres ante PE

De la Redacción

México, DF 15 dic 2009 (CIMAC).- México logra simular muy bien el cumplimiento de los derechos humanos y la democracia al tener un discurso adecuado ante la comunidad internacional, sin embargo sigue sin prevenir y atender la violencia feminicida y sin defender los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres, afirmó Andrea Medina Rosas, del Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (Cladem).

Al participar en la conferencia “Ni una muerte más, balance y perspectivas” celebrada en noviembre pasado, en la sede del Parlamento Europeo (PE), en Bruselas, la activista mexicana dijo que el gobierno se excusa de no tener suficiente capacidad para investigar, detener y sancionar a los responsables de desapariciones y homicidios de mujeres.

El país vive una simulación, aún cuando en octubre de 2007, el eurodiputado español, Raül Romeva i Rueda presentó un Informe sobre los asesinatos de mujeres en Ciudad Juárez, Chihuahua y Guatemala y logró que el PE condenara por mayoría de votos la impunidad en torno al feminicidio en esta región, e hiciera recomendaciones al Estado mexicano, quien tiene un acuerdo comercial con la Unión Europea (UE), dijo.

Agregó que el gobierno mexicano dice “no tener suficiente capacidad para investigar, detener y sancionar a quienes son responsables de las desapariciones y homicidios de mujeres desde hace 16 años”, y desde entonces “pide ayuda financiera para fortalecer su policía y cuerpos de seguridad pública para lograrlo en un acto de total simulación”.

Ante los eurodiputados, Medina Rosas señaló que se ha fortalecido la policía de manera muy efectiva, pero para reprimir y criminalizar a los movimientos sociales; “tan sólo recordemos Atenco y Oaxaca hace tres años, donde las mujeres que se manifestaban fueron violentadas y torturadas sexualmente por la policía de todos los órdenes de gobiernos”, refirió.

Este complejo contexto muestra que, “lo que se presenta en realidad no es exactamente así, tampoco es todo lo contrario, sino que unas cosas sí se parecen a lo que se presenta, pero la esencia no lo corresponde”, señaló.

Por ello Medina Rosas dijo que la colaboración de las organizaciones de la sociedad civil, comprometidas con la garantía de los derechos de las mujeres, con la Unión Europea “todavía no tiene la densidad y fuerza necesaria para que se constituyan en herramientas prácticas en nuestro trabajo local en México”.

IMPUNIDAD Y CORRUPCIÓN

La solución del gobierno de potenciar los cuerpos de seguridad pública y al ejército, como sucede en Ciudad Juárez, es un ejemplo más de simulación pues además de no mejorar la seguridad para las mujeres, con la ocupación militar se ha registrado un incremento exponencial de la violencia sexual contra ella, dijo la activista.

Recordó que la cooperación internacional con el Estado mexicano, logró realizar entre 2004 y 2005 una serie de eventos y publicaciones para armonizar la legislación en el país en relación a los derechos humanos de las mujeres. Pero en los últimos meses, 16 estados (de 32 de la república) pusieron a debate sus constituciones “para contraponer y subordinar los derechos de las mujeres a los derechos del no nacido, 16 estados ya reformaron sus constituciones”, apuntó.

Por lo que consideró que los derechos de las mujeres se encuentran ahora a la deriva y discrecionalidad de las autoridades de los tres poderes del Estado.

EXPECTATIVAS ANTE LA UNIÓN EUROPEA

En esta situación dijo que las cláusulas de democracia y derechos humanos que establece la UE son un punto central para la sociedad civil, quien espera que no sostengan la simulación del Estado mexicano y colaboren de manera precisa en poner fin al feminicidio.

“Coincidimos en que la democracia y los derechos humanos se construyen en procesos estructurales y no sólo con acciones conjuntas y en que la transversalidad en el Estado de la perspectiva de género, implica acciones específicas y constantes que se deben reflejar en la vida de cada ciudadano y ciudadana”, afirmó,

Declaró que crear fiscalías, comisiones, mesas de trabajo sin facultades, presupuesto suficiente ni estructura adecuada, son acciones deliberadamente inefectivas para garantizar la libertad y la vida de las mujeres.

La necesidad de contar con mecanismos precisos y efectivos de monitoreo, vigilancia, exigibilidad, transparencia y rendición de cuentas ayudaría a saber en qué se destinan los recursos y cuáles son sus resultados en el corto, mediano y largo plazo.

“No querer ver la simulación y complicidad que el Estado mexicano tiene en la muerte violenta de mujeres por el hecho de ser mujeres es actuar en semejanza a él y nosotras estamos convencidas que Europa tiene para América Latina mucho más que palabras para ofrecer, mucho más que cooperación sin rendición de cuentas claras”, concluyó.