La redacción
MEXICO, DF, 11 de noviembre (apro).- La Comisión de Mediación (Comed) entre el Ejército Popular Revolucionario (EPR) y el gobierno federal reveló que las indagatorias de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), sobre el caso de Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Cruz Sánchez, confirman que los activistas fueron víctimas de desaparición forzada a manos de agentes de la Procuraduría de Oaxaca, en mayo de 2007.
En conferencia de prensa, Miguel Álvarez y Enrique González Ruiz, integrantes de la Comed, mostraron documentos entregados por la Primer Visitaduría General de la CNDH, en los que les informan que, de sus indagatorias, queda claro que se reúnen los elementos jurídicos internacionales para considerar que se trató de una desaparición forzada.
En el texto, de 14 cuartillas, se advierte que, “del análisis de todas las evidencias que se valoraron, cobró mayor certeza jurídica la presunción de que ambos agraviados, después de su detención, fueron trasladados, inicialmente de manera velada, al interior de instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del estado de Oaxaca, ocurriendo tales sucesos entre el 24 y 25 de mayo de 2007, fecha en que nada se volvió a saber sobre su paradero.
“Ello implicaría que la obtención de las pruebas dependería de la cooperación del propio Estado; y porque además esas pruebas se encuentran a disposición del gobierno, o deberían haberlo estado si éste hubiera procedido con la debida diligencia durante el transcurso de sus investigaciones que estuvieron bajo su control”, se advierte en el reporte.
Por esa razón, la Comed hizo un llamado a las autoridades señaladas en la recomendación 07/2009 a asumir el exhorto, así como a dar respuesta a todas las preguntas aún pendientes, con el objetivo de dar con el paradero de los dos guerrilleros, castigar a los responsables y reparar los daños y perjuicios.
Los integrantes de la Comed consideraron que esas conclusiones son un primer paso para fundamentar la desaparición forzada de los dos miembros del EPR de acuerdo con los estándares y términos internacionales y consecuentemente nacionales.
Lograr ese paso, “de consolidar el caso como tipificado, permitirá al EPR, dijeron, aun en el caso de que la Comisión (de Mediación) desapareciera, poder presionar en el tema de los derechos humanos”.
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